Ya son 15 años del Premio Emprender Paz, una iniciativa que ha visibilizado y destacado el compromiso del sector empresarial para promover dinámicas de desarrollo social en territorios y poblaciones afectadas por la violencia.
Este año el primer lugar fue otorgado a la Red Departamental de Mujeres Chocoanas que agrupa a 52 organizaciones. Desde 2004 crearon el restaurante La Paila de mi Abuela, que retrata la historia de 20 mujeres a través de platos típicos. El restaurante ubicado en el centro de Quibdó sirve como testimonio de las recetas heredadas del Atrato.
Kahai, la primera empresa en el mundo en industrializar y comercializar Cacay, se llevó el segundo lugar. La nuez de este fruto amazónico es usada para la transformación de productos para la industria cosmética, farmacéutica y nutricional, y se convierte hoy en una oportunidad para el desarrollo económico sostenible que contribuye a la reforestación. Kahai no solo marca la historia del Cacay; también cuenta el proyecto de vida de 200 familias de los departamentos de Meta, Caquetá, Putumayo y Guaviare, quienes hoy tienen la oportunidad de mejorar sus ingresos y su calidad de vida.
El tercer lugar fue para ‘El Sueño de Chocolate’, un proyecto de Casa Luker desarrollado en el Urabá Antioqueño, Tumaco (Nariño), Huila y Casanare. Se trata de una idea enfocada en mejorar el ingreso de 2.300 pequeños productores, quienes proveen la materia prima a Casa Luker. De esta manera, ellos contribuyen a fortalecer el tejido social, y aportar al equilibrio del medio ambiente. Un sueño que se enmarca en lo que significa el chocolate: energía, felicidad y, sobre todo, el sentimiento de bienestar.
El cuarto lugar fue entregado a la ‘Redes Territoriales’ de Asoanei, colectivo conformado por 506 productores indígenas y campesinos de la Sierra Nevada de Santa Marta y la Serranía del Perijá, en La Guajira y Cesar. Estos grupos producen y comercializan café y cacao orgánico, y ofrecen a sus asociados procesos de capacitación en producción de biofertilizantes, y en temas calidad y catación. Un proyecto con una especial atención en los jóvenes para que sean ellos quienes continúen con el legado dea la producción cafetera y cacaotera de la región, fortaleciendo la dinámica económica de las comunidades y conservando su entorno de una manera sostenible.
“Estos proyectos productivos y sociales demuestran que el trabajo en equipo entre empresas y comunidades es fuente de inspiración para empresarios del país, quienes siempre pueden encontrar alternativas para aportar a sus negocios y, a la vez, construir paz”, afirmó Liliana Hernández, directora ejecutiva de la Corporación Emprender Paz.
El Premio Emprender Paz se lleva a cabo bajo el liderazgo de Fundación Grupo Social, una organización que durante 110 años se ha comprometido con el bienestar de los colombianos, y cuenta con el apoyo de la Embajada de Suecia, la Fundación Konrad Adenauer y la Fundación Ayuda en Acción.