Leidy o Bonnyrap, como la conocen en el barrio San Luis Altos del Cabo de la localidad de Chapinero (Bogotá), es una amante de la cultura urbana. Desde muy pequeña se enfocó en el Hip Hop como una forma para luchar contra la injusticia y la desigualdad social. Hoy a sus 29 años de edad y como madre de un niño de 11 años, lidera ´Duelos de tinta´, una de las iniciativas que hacen parte del proceso que acompaña Fundación Grupo Social y cuyo objetivo es promover la tolerancia y el respeto entre los jóvenes de esta zona de la capital.
Fundación Grupo Social lleva a cabo un proyecto especial en la Unidad de Planeación Zonal 89 (UPZ 89) San Isidro-Patios en Bogotá, el cual está orientado a despertar e inculcar el liderazgo colectivo con la población juvenil local.
“Esta iniciativa promueve el respeto y la tolerancia en un ambiente de competencia positiva y respetuosa como son las batallas de estilo libre, que es un rap creado en el momento, improvisando a la vez que se rapea y, expresando lo que se ve o lo que se siente sin dejar el ritmo de manera constante”, indica Leidy.
Todos los días Leidy se levanta muy temprano, desarrolla sus labores como esposa, madre y cuidadora de un menor de edad. Luego se dedica a gestionar las redes sociales con el fin de promocionar su sueño y, como influenciadora, a desarrollar actividades para que los jóvenes se reconozcan, se relacionen y actúen colectivamente en el territorio.
“Después de almuerzo y dejar mis cosas listas, voy al ‘estudio’, sitio de reuniones de los integrantes de la organización Páramo Beat, a la que pertenezco. Compongo letras, hago música y produzco pistas para algunos clientes de Cartagena y Barranquilla. Con esto, no solo genero ingresos para mí, sino que también logramos que otros compañeros tengan trabajo; así me gano la vida, entre el estudio y la música”, indica.
“Hago parte del grupo de influenciadores, trabajamos con hombres y mujeres entre los 18 y 28 años de edad. Con el apoyo de Fundación Grupo Social, hemos aprendido a relacionarnos con las otras organizaciones del barrio y apoyarnos entre todos: si alguien saca un proyecto lo gestionamos por redes, porque son iniciativas que benefician no solo a la comunidad sino a los integrantes de estos colectivos”, destaca Leidy.
“San Luis es un barrio alejado de la ciudad, pocos saben que existe. Llegó la Fundación y empezamos un trabajo que nos ha dejado experiencia para la ejecución de proyectos, el conocimiento y una nueva manera de relacionarnos entre nosotros y con otros. Qué chévere que nos hayan volteado a mirar”.
´Bonnyrap´ y los otros integrantes de Páramo Beat tienen un sueño: crear la escuela de Freestyle en San Luis. “Es la primera vez que hacemos un proyecto de esta forma tan ordenada. Siento felicidad y tranquilidad al ayudar a la comunidad, sobre todo a los jóvenes. Con ‘Duelos de tintas’ les enseñamos a los 16 beneficiarios de la iniciativa, poesía, rimas, técnica vocal, expresión, puestas en escena, lectura e inculcamos valores como la tolerancia, la empatía y el respeto, que son necesarios en nuestra sociedad”, afirma.
“Queremos enseñar a los jóvenes y a los adultos que se puede hacer música a través de este arte sin ser estigmatizados, y que, al hacerlo, inculquemos valores a través de la creación de letras que se traducen en poesía”, dice esta mujer, que día a día libra ‘batallas’ en favor de la convivencia en su territorio.