3.213 nuevas razones para disfrutar el meandro del río Tunjuelo

Recorrer hoy el meandro del río Tunjuelo, espacio que hasta hace un tiempo era impenetrable por la inseguridad que generaba la presencia de habitantes de calle, consumidores de sustancias psicoactivas, escombros y otras situaciones, se convierte en una experiencia agradable, teniendo en cuenta que han sido las acciones de recuperación y apropiación que desarrollan constantemente actores estratégicos como las instituciones públicas, la comunidad y Fundación Grupo Social, lo que ha permitido que este sitio sea un lugar de encuentro y disfrute para la comunidad del Corredor de Integración Vecinal en la localidad de Bosa.

Los líderes y lideresas de la red Lazos Activos, que son un grupo de personas que trabajan conjuntamente por el bienestar de los habitantes del Corredor de Integración Vecinal, al conocer la estrategia de la alcaldía de Bogotá, de aumentar el arbolado urbano tanto en calidad como en cantidad para promover la conectividad y  corresponsabilidad social en su manejo y gestión y, además, reverdecer la ciudad, decidieron proponer a la alcaldía local de Bosa, que en esta zona, en el meandro del río Tunjuelo, se sembrara un bosque urbano y fuera uno de los 19 que tiene proyectados esta administración.

Más de 400 personas - vecinos de los barrios del entorno del meandro, la comunidad educativa de los colegios Bicentenario la Independencia y Alfonso Reyes Echandía, líderes de la red lazos activos, colectivos, organizaciones sociales, miembros de consejos de administración de los conjuntos, medios comunitarios del sector, funcionarios de la alcaldía local de Bosa y profesionales de Fundación Grupo Social, se dieron cita para iniciar con la plantación del primer bosque urbano de esta localidad. Este arbolado aporta en la reducción de más de 900 toneladas de CO2, protege la estructura ecológica principal de Bosa y mejora la calidad del aire de la localidad y de Bogotá.

José Luis Sanabria, líder de la red Lazos Activos, indicó que con este bosque urbano en el meandro del río Tunjuelo, se logra combatir el cambio climático, mejorar la calidad del aire y recuperar la presencia de la flora y fauna en la ciudad.

A su vez, María Eulalia Dávila, lideresa que propuso el lugar para sembrar este bosque urbano, indicó que, para ella como habitante de este sector de Bogotá, lograr que la institucionalidad concretara, gracias a la gestión de la comunidad, la siembra en un solo lugar 3213 árboles, que iban  a ser distribuidos en toda la localidad, es un triunfo representativo y un beneficio inmenso para todos.

De esta forma se garantiza que este espacio sea un escenario para que cientos de habitantes del Corredor de Integración Vecinal lo apropien y se proyecten otras intervenciones que favorezcan su sostenibilidad, por ejemplo, los dos Procesos Comunitarios de Educación Ambiental, Procedas, que se llevarán a cabo con recursos del Fondo de Desarrollo Local de Bosa en el meandro del río Tunjuelo: Mujeres de Bosa sembrando dignidad (Colectivo Alicia Perilla Morales) y Rehabilitación agroecológica y apropiación del espacio público (Colectivo Huerta El Roble).

Erlika Murillejo Gaona, directora ejecutiva del colectivo Alicia Perilla Morales y, consejera ambiental de Bosa indicó que su proceda: “Mujeres de Bosa sembrando dignidad”, está enfocado hacia las mujeres vulnerables, “para que ellas tuvieran un espacio de esparcimiento, aprendieran sobre el medio ambiente, reconozcan los tipos de violencia y las rutas de atención.

“Encontramos este sitio, un lugar perfecto para ello. Nos unimos 220 mujeres para apoyar esta gran labor de la recuperación del meandro, donde desarrollaremos talleres ambientales y otros sobre prevención de la violencia; las empoderaremos a través de la cultura, el arte y el ambiente, ya que, para muchas, este es su primer contacto directo con la naturaleza. Buscamos, además, hacer labor de cuidado y  reservación de las especies allí plantadas”, sostuvo Murillejo Gaona.

Más de 200 habitantes de Bosa se unen por el cuidado de sus espacios públicos