Con diversas actividades encaminadas a generar apropiación del proceso, a fortalecer el trabajo colaborativo, el liderazgo y la comunicación y a intercambiar vivencias entre los asistentes, que permita un mayor reconocimiento y relacionamiento, se llevó a cabo en Fusagasugá, un encuentro de los líderes de la red Lazos Activos.
En un primer momento y, a partir de una carrera de observación, se ubicaron varias pistas con el fin de que los participantes identificaran las cuatro rutas (La vida, la unión, el saber y el río) y posteriormente, armaran el mapa del Corredor de Integración Vecinal. El moderador del ejercicio junto a los líderes, realizaron una reflexión en torno al sentido que aportan las rutas al proceso y cómo la falta de compromiso puede generar vacíos y acciones inconclusas y cómo, cuando todos aportan, se logran los propósitos planteados.
De igual forma, el mapa del Corredor de Integración Vecinal permitió identificar en cada ruta las iniciativas que desarrollan los líderes y cómo sus finalidades aportan a lograr una mayor apropiación del espacio público desde el uso, disfrute y cuidado.
En el segundo momento, se plantearon dinámicas que incentivaron las habilidades colaborativas en los líderes, se fomentaron estrategias de integración entre las rutas y se identificaron situaciones que poco a poco aportan a la cohesión social.
Para Jenny Paola Morales integrante de la agrupación Erce Danza, el encuentro de líderes y lideresas de la red Lazos Activos, le permitió alimentar lo personal y lo colectivo. “Desde estos talleres se fortalecen los procesos individuales y grupales porque nos ayudan a potenciar las capacidades y las habilidades para trabajar en pro de la comunidad y cohesionarnos.
“También, cambia el dinamismo de las acciones grupales, nos motiva a darle continuidad al proceso y genera mayor permanencia de quienes hacemos estos ejercicios de forma voluntaria”.
A su vez, Saúl Quiroga líder comunitario del barrio Laureles III sector, la experiencia vivida, es un proceso bueno porque se desarrollan actividades que permiten el reconocimiento del Corredor de Integración Vecinal y la unión con otros.
“Estos ejercicios nos ayudan a conocer más nuestro territorio, ayuda a establecer relaciones entre vecinos y fortalecer el trabajo colectivo para el logro de objetivos comunes que permite la unión”.
Carlos Quintana, estudiante del colegio Alfonso Reyes Echandía y miembro del grupo de comunicaciones, comentó que el evento le brindó experiencias y aprendizajes significativas a título personal y como líder.
“Me dieron nuevas herramientas para gestionar acciones en el entorno y conocer más de cerca lo que hacen otros como son las iniciativas en el espacio público que ayudan a la integración entre vecinos”.